Nací en la Ciudad de México, y desde niña, quedé encantada con hacer gelatinas. Me fascinaba ver cómo un líquido se convertía en sólido, y la textura de la grenetina me parecía casi un hechizo. Con cada gelatina que preparaba, mi amor por este arte crecía, hasta convertirse en mi pasión.
Estudie durante dos años el curso de Formación Adaptada en Hostelería en acidH, en la ciudad de Barcelona. Durante mi formación, realicé prácticas profesionales tanto en una cafetería como en una escuela pública, donde pude aplicar y desarrollar mis habilidades en el mundo de la hostelería.
